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Notas de acontecimientos

"Más corazón, más participación, nueva cabeza" :: Nuevos desafíos de la formación política

de David Brähler

Taller estratégico de la red de institutos de formación política en Montevideo

Un puente que conecta, una rueda de molino que canaliza, una cima que hay que conquistar: todas metáforas para la tarea estimulante de la formación política, que surgieron durante la presentación de los participantes del encuentro anual de la red de institutos latinoamericanos de formación política. A raíz de la invitación del programa regional "partidos políticos y democracia en América Latina" se reunieron 13 representantes de institutos de formación de 11 países para un taller estratégico en Montevideo.

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No importa si en Perú con su paisaje político deteriorado, o bajo el régimen dictatorial de Venezuela, o al inicio de un proyecto de renovación nacional como en Argentina: a quien pretende formar políticos en América Latina no le falta el trabajo. Mientras algunos institutos - pertenecientes a un partido - como por ejemplo la Escuela de liderazgo del Partido Nacional en Honduras o la Secretaría de Formación del partido TODOS en Guatemala - que buscan primordialmente formar a sus militantes y ayudar a expandir su presencia nacional, otros centros de estudios -como por ejemplo la Fundación Rafael Preciado de México o el Centro de análisis e entrenamiento (Caep) de Colombia - pretenden también llegar a un público más amplio y fomentar la democracia en sus países.

El proceso creativo de este encuentro anual llevo el sello distintivo de Stefan Hofmann. El director del centro de formación política de la Fundación Konrad Adenauer en el estado federal de Badenia-Wurttemberg es inventor de varios modelos formativos que representan una innovación en la educación ciudadana. Hofmann facilitó las sesiones con la perspectiva que "tanto el intelecto como lo lúdico deben ser dirigidos a la formación para lograr un verdadero éxito educativo", explicó el politólogo. Esto significaría que habria que atraer a personas ajenas a lo político partiendo de su motivación propia. Mientras que a los militantes , los temas políticos se los debería presentar de un modo más emocional. En la asesoría de políticos finalmente, sería adecuado señalar la importancia de trabajar su imagen personal para tener una mejor llegada al electorado.

En todo esto es importante tener en cuenta las motivaciones de los distintos grupos a los que se dirige la formación política. "Los tres pilares de la motivación se llaman competencia propia, autonomía y comunidad", explicó Hofmann. El respeto de estos tres aspectos en la formación, genera un interés vivo, satisfacción y relaciones sustentables entre los participantes, por ejemplo en un seminario. Estudios científicos comprueban de que manera el ser humano aprende mejor: no basta solamente con decir algo, o con escuchar y ver algo. El mayor aprendizaje se da cuando uno tiene la oportunidad de hacer algo personalmente. Las ideas educativas sobre autonomía y un entorno favorable de aprendizaje de la educadora italiana María Montessori reflejan estos conocimientos. Aplicando estos conocimientos a la política se podría por ejemplo tener más en cuenta la autenticidad y lenguaje emotivo de posibles candidatos políticos como también desarrollar un mensaje más emocional para llegar a los votantes.

A los múltiples aspectos del populismo, como por ejemplo la lucha contra el supuesto establishment o "el sistema", la formación política debe responder con información sólida. Para enfrentar los miedos de perder estatus social, identidad o confianza en los medios y la política que muchas veces están detrás de la motivación populista, los institutos y partidos deberían aclarar los objetivos de su trabajo y ofrecer argumentos y soluciones claras, postuló Hofmann. A la vez no se debería olvidar la situación emocional de los ciudadanos. Por eso Hofmann señaló como desafío actual "crear confianza sobre la base una visión completa de la realidad, sin negar los aspectos que no convienen".

En un análisis FODA los participantes juntaron luego varias debilidades y fortalezas como también oportunidades y amenazas para el fortalecimiento de la red de institutos. Entre las debilidades advirtieron la falta de una visión general de todas las fortalezas y proyectos de los institutos. Entre las fortalezas destacaron la misma perspectiva y base de valores democráticos, una misma experiencia cultural y sobre todo el mismo entusiasmo por la idea de fortalecer lazos. Entre las oportunidades figuraron el intercambio de experiencias y buenas prácticas así como también la oportunidad de desarrollar posturas en común contra el populismo.

Durante los dos días de taller llenos de dinamismo los participantes intercambiaron las múltiples experiencias de sus países y partidos. Durante un learning lunch con la directora del equipo África de la Fundación Konrad Adenauer Andrea Ostheimer los participantes se aggiornaron sobre la formación política y las misiones de paz en los países subsaharianos. En conversaciones mantenidas con representantes políticos uruguayos en el parlamento y la sede del Partido Nacional tuvieron la oportunidad de estudiar la formación política en Uruguay.

El deseo de una unión más activa y más estrecha como una red de ideas para llevar temas políticos a la gente y formar los políticos del mañana seguramente, éste es un resultado alentador del taller estratégico.

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