El prestigioso "Estoril Political Forum” finalizó el 25 de junio con el "Konrad Adenauer Memorial Dinner". Cada año reúne más de 200 participantes del ámbito de la ciencia, política y economía y también estudiantes de Europa y Estados Unidos en Portugal. Este año, el foro fue dedicado al tema "Reconsidering the Third Wave of Democratization – 40 Years Portuguese Revolution – 25 Years Fall of the Berlin Wall". En su discurso, el director de la oficina de la Fundación Konrad Adenauer para España y Portugal, Thomas B. Stehling, recordó los aniversarios en 2014 que nos han permitido hacer tanto una retrospección como también una evaluación de los retos actuales. Paz y libertad no se pueden dar por sentado, como han mostrado los eventos en Ucrania. Tenemos que seguir defendiéndolas activamente hasta hoy. Lo mismo es válido para la cohesión en la Unión Europea para que la crisis económica y financiera ha presentado una carga grande. Los recientes éxitos en Irlanda, España y Portugal han demostrado la efectividad de actuar conjuntamente. Para el siguiente paso se tratará de apoyar el proceso de “saneamiento interno” en los países de crisis, y especialmente de transmitir confianza en el futuro a la generación más joven. Para ello, es preciso que el desempleo juvenil se reduzca sensiblemente. Con ocasión del 40° aniversario de la Revolución de los Claveles, Stehling recordó también las aportaciones de la Fundación Konrad Adenauer y otras fundaciones alemanas que acompañaron activamente a Portugal en su camino hacia libertad, democracia y el Estado de Derecho desde 1974. No siempre era una labor sin riesgo. Gerd Langguth, quien sería más tarde el Presidente de la Fundación Konrad Adenauer, participó en enero de 1975 junto con Wilfried Martens y Carl Bildt en el congreso fundador del partido Centro Democrático e Social, hoy uno de los dos partidos de gobierno. Por razones de seguridad tuvieron que cambiar el lugar de la conferencia de Lisboa a Oporto. Sin embargo hubo también ahí centenares de manifestantes, sobre todo comunistas, que levantaban barricadas, tiraban cócteles Molotov y quemaban coches. En consecuencia, les era imposible a los participantes de la conferencia salir del edificio. Gerd Langguth consiguió finalmente, en la madrugada del día siguiente, bajarse por una cuerda que había encontrado en el “Palacio de Cristal” desde una ventana en la tercera planta y comunicarse con los medios de comunicación internacionales. Los demás participantes fueron librados hacia las siete de la mañana por una unidad de paracaidistas, que habían sido enviados desde Lisboa. Ese fue el comienzo de la colaboración entre la Fundación Konrad Adenauer y el Partido CDS que dura hasta hoy.