A la parte abierta al público del foro chileno-alemán sobre los „desafíos para la democracia“ dieron inicio los directores de IDEA y FLACSO, Daniel Zovatto y Ángel Flisfisch. En representación de todas las fundaciones políticas alemanas dio inicio al foro abierto la presidenta de la Hanns-Seidel-Stiftung, Ursula Männle. En las palabras de bienvenida se puso énfasis en que una democracia vital requiere la participación de todas las capas sociales para lograr un alto grado de progreso político y económico. Con este trasfondo la misión de las fundaciones políticas tiene múltiples aristas: por una parte, insertar ciudadanos competentes en la democracia, por otra, desarrollar discursos de la sociedad civil. En principio las democracias nunca están „listas“. Tampoco se puede partir de la base de una „estabilidad automática de esta forma de gobierno“.

En los dos días de duración del foro y en cuatro paneles, expertos de Alemania y Chile debatieron en torno a los elementos constitutivos del sistema democrático y de los desafíos políticos de una sociedad y de un mundo en constante cambio. El tema del primer panel fue “Regulación de la relación entre política y dinero - Las tareas regulatorias de los Estados”. El título se eligió en referencia a los recientes escándalos de corrupción y de colusión en Chile. Se discutió además sobre la estrecha conexión entre la política y la economía en Chile y se esbozó una comparación con Alemania; se debatió sobre la alta concentración de poder de algunas compañías (ejerciendo con ello una fuerte influencia política sobre la regulación y sobre los medios); se debatió también sobre las consecuencias de una gran desigualdad de los ingresos y del patrimonio en la estabilidad política de un país.

En este contexto el panelista del Instituto de Investigación Económica de Colonia, Alemania, Dr. Knut Bergmann, se refirió a la importancia de instituciones fuertes. Haciendo referencia a la relevancia del tema corrupción en un país remarcó la necesidad de implementar sistemas de control y mecanismos efectivos. El financiamiento de los partidos en Chile debiera hacerse efectivo con un alto grado de transparencia, tal como es usual en la Alemania actual. El panelista Thomas Krüger, director de la oficina federal alemana de formación política, se refirió a la inherente relación de poder y tensión entre el dinero y la política, la que exige un equilibrio de los intereses sociales.

En el segundo panel de la jornada se discutió sobre la importancia de los partidos como bisagra entre la sociedad y la política. Politólogos de Chile y Alemania debatieron sobre los actuales sistemas partidistas, sobre la pérdida de confianza de los ciudadanos en la política, quienes al mismo tiempo plantean altas exigencias al Estado. El profesor Karl-Rudolf Korte subrayó la importancia de los partidos como “instancias particulares” en una democracia, en cuanto no existe otra institución social sujeta a un control social permanente, a debates públicos y a elecciones. En la actualidad, tanto en Alemania como en Chile se percibe un ambiente de desconfianza frente a estos órganos de formación de voluntad política. A la luz de la crisis de inmigrantes, Alemania se enfrenta hoy en día a una fuerte polarización del debate político.

Los medios de comunicación y sus diversos canales dentro de una democracia fueron los temas centrales en el segundo día del foro. Periodistas y publicistas de Chile y Alemania analizaron los desafíos actuales incluyendo la digitalización. Chile se ve enfrentado al problema de una fuerte centralización de los medios de prensa escritos y televisión. Hace falta un marco regulatorio estable. Según las palabras de la Dra. Ursula Weidenfeld, pese a que en Alemania existe este marco regulatorio, la confianza en el periodismo y la credibilidad de la prensa se diluye más y más. Entre la democracia y los medios hay una interdependencia: Se requiere de un marco jurídico y de pluralidad que permita entregar informaciones objetivas, las que a su vez constituyen el fundamento para generar la toma de decisiones en democracia. En este sentido, las democracias no se basan exclusivamente en las elecciones sino que también en el proceso organizado del discurso periodístico.

En el último panel se debatió sobre cuestiones constitucionales y el marco jurídico óptimo de una democracia. Una constitución ofrece este marco regulatorio, sin fijar normas detalladas para la sociedad. Actualmente la Presidenta de Chile se concentra en lograr una mayor participación de la sociedad para renovar la constitución actual, la que fue elaborada durante la dictadura. Los expertos del panel apoyan este proceso de participación en Chile y presentaron elementos claves de la constitución alemana y sus particularidades. El objetivo final es que la constitución debe tener una mirada a largo plazo. El Prof. Dr. Detlef Nolte, Director del Instituto Alemán de Estudios Globales y Regionales GIGA, comparó las constituciones latinoamericanas entre sí, las que en su mayoría han sido modificadas con posterioridad a los regímenes autoritarios.

La democracia es un proceso continuo: Chile y Alemania se enfrentan a diferentes desafíos pero tienen algo en común: La posición de Chile en América Latina es similar a la de Alemania en Europa. Ambos son engranajes políticos, sociales y económicos de estabilidad en sus regiones.

Por lo tanto, podemos señalar que tienen una responsabilidad política regional.

En la parte final del foro se expresaron las voluntades bilaterales de continuar con este formato político de reuniones en el futuro, las que tendrán lugar alternadamente en Alemania y en Chile.

A modo de conclusión se señaló que las ya cercanas relaciones entre ambos países se profundizan aún más con este encuentro.