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¿Cómo partimos de la creatividad ancestral para ir más allá de las posibilidades locales? ¿Cómo combinamos saberes y habilidades para generar nuevas soluciones con perspectiva intercultural? ¿Qué diferencias hay entre la creatividad indígena y no indígena? Fueron algunas de las varias preguntas que motivaron un rico intercambio de saberes respecto a innovaciones creativas en contextos comunitarios.

En esta oportunidad, Lima fue la sede que acogió este taller, en el que el Profesor rumano/alemán George Teodorescu explicó en detalle la metodología de trabajo intercultural “innovación es esperanza”. Se trata de una metodología que permite incorporar soluciones creativas en procesos participativos con comunidades indígenas, tomando en cuenta aspectos críticos como vivienda, refugio, energía y agua, en un marco de ecosistemas sustentables, enfocados en la búsqueda de soluciones basadas en oportunidades y talentos creativos locales.

El Prof Teodorescu explicó que la alternativa de desarrollo no es el consumismo, es usar los recursos locales, adaptando, rediseñando, con la participación de las personas en comunidades locales, incrementando su auto estima, sintiéndose en casa como el mejor lugar para estar, como se puede observar, además de mejorar las condiciones de vida, Innovation is Hope pambién tiene un impacto sin duda efectivo para evitar los fuertes procesos migratorios campo – ciudad.

La aplicación de esta metodología de recoger, transformar y devolver parte del principio de que la creatividad es igual en todo ser humano, no hay diferencia entre Newton y un campesino del altiplano, no hay diferencia entre el pensamiento abstracto o vernacular, si bien la creatividad puede ser divergente o racional. Citando a Einstein, “la imaginación te lleva a todas partes”.

Se toma en cuenta también que no hay soluciones universales, y que es necesario recoger ideas frescas, recursos y talento local, formando una pirámide de tres componentes. De esta manera se apunta a satisfacer necesidades y a vivir mejor.

Por su parte, los/as participantes de Guatemala, Colombia, Bolivia y Chile tuvieron espacio para presentar ideas e iniciativas innovadoras locales. El intercambio permitió hacer un análisis de situación en cada caso y sugerir la incorporación de mejoras efectivas y prácticas basadas en experiencias previas de “Innovation is Hope”.

Finalmente, los participantes se dividieron en grupos de acuerdo a sus experticias y conocimientos, para trabajar en la construcción de alternativas innovadoras relacionadas a agua, refugio y energía.

Los/as participantes se fueron convencidos/as de los enormes beneficios que proporcionan los procesos de construcción de innovaciones con abordaje intercultural, pues es a través del intercambio de saberes y habilidades que es posible un inter-aprendizaje valioso que busca (y encuentra) beneficios para comunidades locales, donde quiera que éstas se encuentren.