Semana Social Mar del Plata 2014 - Oficina de la Fundación en Argentina
Notas de acontecimientos
El Monseñor Antonio Marino, obispo de la misma ciudad, abrió la conferencia con la Oración por la Patria. Luego, Gustavo Pulti, el intendente de General Pueyrredón (Acción Marplatense), y Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires (Partido Justicialista), hicieron comentarios de apertura. Los dos introdujeron los temas principales de la conferencia, incluyendo la enseñanza pastoral y evangelizadora del Papa Francisco (el ex Cardenal Jorge Bergoglio) en torno a la cuestión social. El Sr. Scioli expuso sobre los desafíos sociales más grandes en Argentina y en el mundo, tal como “la trata de personas, la violencia de género, el narcotráfico, y los adictos”, el último de los cuales constituye un problema de salud pública.
El segundo panel de la noche fue "El Papa Francisco y la cuestión social". El Pbro. Adalberto Odstrcil, secretario ejecutivo de la Pastoral Social, presentó los temas que se realizarían en los paneles durante la conferencia, incluyendo el desarrollo integral, la cuestión de la pobreza, la participación, la importancia de formar una cultura de encuentro, y los desafíos de los jóvenes. El sacerdote enfatizó que es esencial que los privilegiados estén conscientes de las luchas de sus vecinos. José Manuel de la Sota, gobernador de la provincia de Córdoba (Partido Justicialista), disertó después, diciendo que es necesario reconciliar el país para formar “una patria unida” para resolver los problemas sociales, tal como la falta de trabajos para los jóvenes. Los argentinos no se deben unir solo para celebrar los goles de Messi, bromeó. El Sr. De la Sota dijo que quiere crear “un país de trabajadores”, y que el mejoramiento del sistema educativo “es la solución de los problemas de Argentina”.
Después hablaron dos obispos: el Mons. Jorge Casaretto, Obispo Emérito Diócesis de San Isidro, y el Mons. Jorge Lozano, Obispo de Gualeguaychú y Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. El Mons.Casaretto discutió la historia de la Pastoral Social, y la principal meta, la cual es crear una cultura del encuentro para poner el pueblo argentino en un camino a la unidad.
El Mons. Lozano presentó cuatro temas de la enseñanza del Papa Francisco: “los pobres”, “los ricos”, y “el cambio de las estructuras”, y “la feliz de ser un pueblo”. Habló sobre el desarrollo espiritual e intelectual del Papa, y su vida de trabajo con los más pobres, luchando en contra de “la indiferencia globalizada”. El Mons. Lozano notó que el Bicentenario de la Argentina ya está acercando, y que ahora es un buen tiempo “para renovar nuestra pertenencia al pueblo argentino y comprometernos con los más pobres”.
El sábado 28 de junio se realizó la segunda edición de la Semana Social, la cual arrancó con el panel que titulaba “repensar la cuestión social desde la mirada pastoral de Francisco”. En esta mañana Diego Fares, Sacerdote Jesuita dio una introducción con citas del Papa Francisco y sus enseñanzas para reflexión. El Papa argentino resalta, que la gente se debe aficionar para resolver problemas con inteligencia. El Sacerdote hizo hincapié en lo que el Papa llama “el sentido del pobre”. Fares nombra tres cuestiones importantes para Francisco. “En situación de calle” refiriéndose a los pobres, “cuánto pesa un ladrillo” que trata del trabajo de cada uno que va causando transformación y de “una nueva mentalidad” la cual necesitamos para seguir adelante. Después de esta introducción desde un punto religioso, María Eugenia Vidal, Vice-Jefa de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires por el Partido PRO, contó su testimonio a partir del Papa Francisco desde un punto más político. Ella presentó tres grande desafíos que enfrentan los políticos: el primero, la necesidad de participar y de involucrarse. Para el Papa es importante que las personas se involucren en política de una forma cristiana y que tengan fe. La cercanía es el segundo punto. “Que el dolor del otro nos duela”, dice el Papa Francisco. Esa es la única forma de comprometerse. El último desafío en la política es el diálogo. Una herramienta difícil, pero muy importante para encontrar soluciones en equipo. Vidal da un mensaje final: “queremos vivir en un lugar donde no haya supervivencia sino inclusión de verdad”.
Pepe Di Paola, Sacerdote que trabajó en su época con Bergoglio, continuó el panel y habló de las villas y de cómo Bergoglio las fue tomando en cuenta. Di Paola cuenta que el ahora Papa Francisco decidió pararse desde el inicio en los lugares inseguros, desprotegidos, con ausencia del Estado, y miró desde ahí la ciudad de Buenos Aires. El Sacerdote resaltó que Bergoglio se acercó mucho a las villas y empezó con la idea de poner en ellas escuelas, hospitales y servicios básicos. Él resaltaba la importancia del pobre, del cual uno tiene que aprender. La integración y trabajo con niños y jóvenes es muy importante.
La senadora nacional por el Partido Justicialista, Liliana Negre de Alonso, contó a continuación la forma en que Bergoglio formó parte de su vida y como él fue de mucha ayuda. Un dicho del Papa que siempre le quedó en la memoria: “uno más uno es dos, pero uno más Dios es infinito”.
“Hoy ha empezado a funcionar la justicia en Argentina”, así abrió su disertación Luis Barrionuevo, sindicalista jefe de la CGT Azul y Blanca, refiriéndose a la situación judicial de Boudou. Para él son los políticos los responsables del narcotráfico y de la corrupción. En su presentación pidió que se plasme lo que dice el Papa Francisco especialmente en Argentina y que no sólo se lo escuche.
La jornada continuó con trabajo en grupos con las temáticas: Familia, niños y ancianos; pobreza y desarrollo integral, participación y fortalecimiento comunitarios; y adicciones y exclusión en los jóvenes. En estas presentaciones hablaron muchos docentes y expertos en el tema. Después se debatió entre los participantes y se sacaron distintas conclusiones.
Después de una pausa se realizó la presentación del libro "Una tierra habitable para todos" a cargo de Mons. Jorge Lugones, obispo de Lomas de Zamora y miembro de CEPAS, de Mons. Jorge Vázquez, obispo auxiliar de Lomas de Zamora y de Fr. Eduardo Agosta. El objetivo general de la publicación es poner al alcance de las comunidades un pensamiento ecológico y que “la gente pueda apropiarse de herramientas bíblicas, teológicas, entre otras, para que cada uno se haga una opinión personal sobre el tema.” Según ellos existe una crisis ecológica.
La tarde siguió con la exposición en base al lema "El Papa Francisco y la cuestión social", por parte de Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados de la Nación. “La fe es algo determinante en nuestro pueblo”, expresó Domínguez. “Esto forma parte de nosotros, la mayoría de católicos son de América Latina y eso hay que tomar en cuenta”.
En el último panel: "Principales desafíos para el desarrollo integral desde la mirada pastoral de Francisco", se habló sobre la lucha contra la pobreza y de hacer posible que la gente tenga trabajo y una vida digna. Pablo Michelli, conductor de la CTA, defendió el tema de la pluralidad religiosa. Le parece importante, al igual que el Papa, respetar a los que piensan de otra manera, creen en algo diferente y a los agnósticos. Oscar Fortunato, presidente del Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas, tuvo una visión empresarial de la situación. “No hemos producido la cantidad de trabajo necesaria para que la persona pueda ver un futuro hacia adelante”, expresó el empresario y continuó: “hemos generado una sociedad que las personas que se aíslan viven mejor”. Citó al Papa Francisco resaltando la importancia de entender bien la idea del dinero, el cual debe ser para servir y no para gobernar. Su mensaje final fue: “como sociedad creo que debemos volver al mundo del trabajo”.
La jornada del sábado cerró con una misa a la que atendieron todos los obispos y sacerdotes presentes y muchos participantes de la Semana Social.
El domingo se realizó primero una lectura de las conclusiones de los mesas-debate simultáneas y después se discutió sobre "La cultura del encuentro como contribución de Francisco al diálogo y la paz social". Margarita Stolbizer, diputada nacional por el Partido GEN, resaltó el hecho de que un militante político es una persona que no se rinde. Su pedido especial fue que se luche contra la corrupción. “Tenemos que llevar la ética hacia adelante, eso es lo que nos propone Francisco”, añadió la diputada. También discutió Adolfo Pérez Esquivel, activista de derechos humanos, que ganó el Premio Nobel de la Paz en el año 1980. El Sr. Pérez Esquivel dijo que han habido “profetas y mártires en América latina” en la búsqueda de la justicia y la paz, como el Arzobispo Romero en El Salvador, y las monjas Alice Domon y Léonie Duquet en Argentina. Leyó las palabras del sacerdote brasileño Helder Camara, que dijo una vez que cuando daba comida a los pobres, le llamaban “santo”, pero cuando preguntaba por qué los pobres son pobres, le llamaban “comunista”. El Sr. Pérez dijo que hay pobres porque muchos se olvidan de sus vecinos. Notó que el poder del Papa Francisco es que él hace la gente reflexionar, y que él verdaderamente enfrenta la injusticia con sus palabras y sus gestos. Al fin, el ganador del Premio Nobel habló sobre los fundos “buitre”, y leyó de una carta que mandó al juez en Nueva York.
El. Mons. Lozano tuvo las últimas palabras, diciendo que hay que unir los jóvenes y los ancianos, los pobres y los ricos, para formar un solo pueblo y ser “la Patria de justicia y solidaridad que todos queremos”.
La Semana Social terminó con una misa de cierre. Hasta el próximo año!
