Halajtayata es un estudio sobre el rol que juega la “identidad” (sea co-residencial, étnica y/o racial) en el ajuste del poder en Bolivia. La proposición central es ciertamente una concisión que exalta el rol de la autoafirmación étnica (de la etnicidad) y la personificación racial (del “racialismo”) en los procesos históricos de “categorización” que repartieron (y reparten) el ingreso y la representación política. Así, la identidad es planteada como el factor que promueve y desajusta la integración entre los bolivianos y, seguidamente, altera el temperamento de su Estado. Como toda buena reducción que deduce una amplia variedad de descubrimientos empíricos de una proposición general (Homans, en Hechter & Horne pp. 9-14) el argumento central enfatiza que la identidad es predominante en la complexión del poder (social, político y económico) en desmedro de otros factores que son, por su parte, provechosos también en explicar al país. Sin embargo, como toda buena explicación que busca el entendimiento, el argumento “étnico” apuesta a descubrir a Bolivia (particularmente la del siglo xxi) fuera de los prismas de la clase social y el sistema político exclusivamente.