Este tema es relevante en la coyuntura política nacional, pues se sabe que el problema de la tierra en el país es de larga data, y tiene inmersos varios fenómenos como la concentración de los derechos de propiedad sobre la tierra y diferentes olas de violencia que han impactado de manera directa su uso y distribución causando desplazamiento.

El Ministerio de Agricultura y Desarrollo prepara un proyecto de ley para dotar al ejecutivo de herramientas e instituciones para dirigir esta política y de esta manera aumentar la productividad del campo y solucionar problemas antiguos como los derechos de propiedad y concentración de tierra.

Se obliga a tomar en cuenta la trayectoria histórica de la propiedad rural. Por esto, el asesor del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, Alejandro Reyes, exige plantear una política de explotación agraria seria y de larga duración. Este mismo agrega que uno de los problemas principales del tema agrario en Colombia es la acumulación de tierras por parte de las elites. Esto en particular ha traído grandes conflictos, pues se ha implementado un modelo donde los grandes terratenientes aumentaban su dominio a través del arredramiento por pastos. El campesinado trabaja la tierra, la cultiva para su subsistencia y después se la entrega al terrateniente.

Esta tenencia de tierra desata conflictos sociales como la formación de la Asociación Nacional de usuarios campesinos (ANUC) en la que algunos grupos ocupaban violentamente grandes propiedades. Otro problema más complejo es el fenómeno del desplazamiento forzado que se ha incrementado en el país. Estas situaciones han hecho que el Gobierno se concentre en este tema y de una serie de soluciones y reformas como el replanteamiento del uso de tierras del sector ganadero.

Otro tema que merece ser estudiado es el establecimiento del campesinado colombiano en zonas de captación de rentas de mercados ilegales y dominio político hace que estos grupos armado controlen el territorio y estas personas sean expulsadas de sus tierras.

Después de mencionar esto, la “Ley de Victimas” se convierte en tema central. Se señaló que para que haya una verdadera política pública de tierras se debe lograr los derechos de propiedad. Al mismo tiempo, se indica que la “Ley de Tierras” acumulada con la “Ley de Victimas” debe articularse con una política pública macro en relación con el campo. La idea es que haya un proceso de formalización, restitución y modernización para lograr una verdadera productividad.

En cuanto al presupuesto de esta ley se centran en tres capítulos: Medidas de ayuda humanitaria, Medidas de asistencia para la población vulnerable y el tercero se centra en la restitución de tierras. Algunos panelistas consideraron que se puede sacar adelante esta ley y el impacto fiscal no seria tan grande, por otra parte, otros pensaron que este gasto si sería grande.

El Presidente de la Sociedad de Agricultores Colombianos afirmo que hay que pensar en soluciones para darle productividad y oportunidades a quienes viven del agro. Así mismo, reformular una política educativa para el campo y una repartición eficiente y equitativa del suelo.

La conclusión de este debate tiene que ver con el consenso entre los diferentes sectores políticos y la sociedad civil en la necesidad urgente de reformular la política pública de tierras del país.