El evento inició con la presentación y palabras de María Elisa Pinto, líder del proyecto audiovisual, quien agradeció la asistencia del público y mencionó como Colombia es el segundo país más desigual de América Latina, esto marcado por una división socioeconómica impuesta que se conoce como estratos sociales. Dicha división genera etiquetas y condiciona a las personas a un estilo de vida que dificulta la inclusión y movilidad social. Seguidamente, inició la proyección del documental que muestra cómo personas que cotidianamente no tendrían la posibilidad de encontrarse y conversar, reflexionan sobre las divisiones que hemos construido en nuestra sociedad. El barrio donde crecimos, las prendas que usamos, nuestras comidas favoritas, a qué nos dedicamos, los rituales de nuestras familias, las expresiones que usamos, dónde hemos estudiado, qué apellido tenemos, el estrato al que pertenecemos; todas estas son variables de las normas sociales, prejuicios e imaginarios que hemos construido en torno a las clases.
Si bien, el documental ya ha sido presentado en festivales internacionales y como parte de un estudio en colegios públicos y privados es la primera vez que se presenta de manera general y gratuita al público. Posterior a la proyección de la pieza documental se propicio un espacio de diálogo por parte de algunos de los protagonistas, el equipo de producción y los asistentes a la función. Allí, se mencionaron experiencias que se dieron durante el rodaje del largometraje, las percepciones previas y posteriores frente a la estratificación como clasificación social, así como una reflexión final frente a la desigualdad y su impacto a nivel educacional, social, cultural y económico.