La asociación de solidaridad y subsidiaridad que emana de la EconomíaSocial de Mercado tiene, en tiempos de globalización y competencia internacional, la necesidad de salvaguardar sus virtudes y, por ello, no ponerse a su disposición. La economía debe servir a los hombres. ¿Cómo se puede mantener la competitividad sin renunciar a la igualdad social, a las condiciones laborales humanas y a la equidad? Esta es la pregunta central, sobre todo en economías en las cuales los anteriores principios no significan nada, en las cuales los derechos laborales y humanos son despreciados, en las cuales el medio ambiente es explotado y en las cuales la protección del patrimonio personal es ignorado. Es una pregunta de valores tanto en Alemania como en México. Abordar esta pregunta desde todos los ángulos e intentar buscar respuestas a la misma es una de las metas de la Cátedra Konrad Adenauer.